A lo largo de mi vida, he tenido el privilegio de conocer y rodearme de mujeres empoderadas, sabias y luchadoras, feministas la mayoría, de quienes he aprendido mucho y a quienes agradezco que hayan estado o sigan presentes en mi vida. El pasado 26 de enero tuvo lugar un acto, en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad de La Laguna, en el que participaron dos de esas mujeres. Por un lado, Clara Bredy Domínguez, amiga querida y colega de profesión que presentaba su libro “Yo, intensa” y por otro, Olga Mesa Jorge, asesora editorial y acompañante de Clara en su travesía literaria, además de directora “Culturalias”. Sigue leyendo Mujeres intensas
«Lo importante es que sea feliz»
Últimamente he escuchado en varias ocasiones, en el contexto educativo, la expresión: no importa si no aprende, lo importante es que sea feliz. Y me pregunto si es incompatible aprender y ser feliz. ¿En qué momento dejamos de intentar que el aprendizaje sea una experiencia placentera? Creo que es un deber docente enseñar de forma amena, motivadora y transmitir la importancia que tiene la adquisición de conocimientos para nuestro desarrollo personal. Es cierto que hay contenidos tediosos y que no nos van a resultar funcionales a lo largo de nuestra vida, pero como dice aquella proverbial frase, que me transmitieron en mi familia, el saber no ocupa lugar. Sigue leyendo «Lo importante es que sea feliz»
Y después del 25 N, ¿qué?
Después de décadas de militancia feminista y de encabezar manifestaciones contra las violencias machistas, llevo un par de 25 N sin participar en actos de este tipo. Eso no quiere decir que no haga nada porque siempre en la universidad dedico una clase a abordar el tema, pero cada vez me cuesta más soportar determinadas incoherencias. Sigue leyendo Y después del 25 N, ¿qué?
Cómo sobrevivir a la sociedad del malestar
Los modernos estados de bienestar sitúan sus orígenes a finales del siglo XIX con la legislación social desarrollada por Bismarck en Alemania, pero se consolidan a partir de la II Guerra Mundial con el fin de garantizar derechos sociales a la ciudadanía y un marco de convivencia basado en los Derechos Humanos. Décadas después, el siglo XXI no ha supuesto la reafirmación del bienestar, más bien al contrario, nos encontramos en un mundo desgarrador y generador de malestar y sufrimiento. Sigue leyendo Cómo sobrevivir a la sociedad del malestar
Es algo más que un beso
Este verano las deportistas españolas nos han deparado grandes alegrías, enturbiadas por el machismo y la violencia de los señoros de turno. Pero esto va más allá de lo sucedido a Jenni Hermoso, el beso no deseado es un símbolo de lo que llevamos las mujeres soportando años, siglos,… ¿Por qué ahora? Porque estamos hartas, porque el beso ha sido la gota que ha colmado el vaso de los abusos de poder. Porque esto va de eso, de poder. Sigue leyendo Es algo más que un beso
Hechos, no palabras. Reflexiones preelectorales
Cuando dejé el activismo feminista dije que seguiría siendo feminista a pesar de las feministas (aunque lo correcto es matizar: a pesar de algunas feministas). En el feminismo he conocido las pensadoras más lúcidas y las mujeres más maravillosas del mundo y también a quienes se dicen feministas y acaban haciendo políticas en contra de nuestros derechos y bienestar. Por eso, a partir de ahora creo que es más importante fijarnos en los actos más que en las palabras, especialmente en momentos en los que la mentira se ha instalado en nuestras vidas como forma de comunicación política. Sigue leyendo Hechos, no palabras. Reflexiones preelectorales
Violeta y roja. Reflexiones postelectorales
Que volvamos a tener un país gobernado por la derecha y la ultraderecha en buena parte de territorios que fueron tradicionales feudos de la izquierda tiene múltiples interpretaciones y resultaría simplista reducirlas sólo a una o dos razones, voy a intentar hacer un sencillo análisis de lo ocurrido, con la esperanza de que no se vuelva a repetir: Sigue leyendo Violeta y roja. Reflexiones postelectorales
Las quitaniños en el lado oscuro. Reflexiones sobre estereotipos e identidad profesional del Trabajo Social
El pasado viernes 12 de mayo de 2023 tuvo lugar en la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias una jornada formativa organizada por la administración pública sobre “El acompañamiento desde el modelo de parentalidad terapéutica” impartida por un señor al que no voy a hacer más publicidad de la que ya tiene, y del que diré que es psicopedagogo, educador social y formador en estas cuestiones de la crianza protectora de criaturas. En una sala repleta de profesionales de la intervención social, el ponente comenzó la sesión planteando una elección: si preferían una intervención sesuda y muy académica o algo divertido y dinámico, por supuesto, el público eligió lo divertido, introduciendo la formación con algunos vídeos rockeros, que oye, que la música está muy bien y puede resultar muy terapéutica en la crianza (salvo que sea reguetón sexista)… pero prosigamos. También indicó que quería conocer los perfiles profesionales allí presentes y comenzó a preguntar para que el auditorio indicara, a mano alzada, a qué perfil pertenecían. La situación se desarrolló, más o menos, de la siguiente forma (el vídeo, ya que la sesión fue presencial y en streaming, no se encuentra disponible en el momento de redactar este post por lo que no se puede transcribir literalmente):
- ¿Quiénes son de psicología? (levantan la mano las personas presentes)
- ¿Quiénes son de pedagogía? (ídem)
- ¿Quiénes son educadores/as sociales? (ídem)
- ¿Quiénes son trabajadoras/es sociales, esas que quitan los niños a las familias? (levantan la mano) a lo que añade el ponente: ya notaba yo la oscuridad por ahí (refiriéndose a donde estaban sentadas)
- ¿Quiénes son de integración social?
- …
Fueron nombrados múltiples perfiles profesionales del ámbito de la intervención social y sólo con las trabajadoras sociales se permite hacer semejante “broma”. Me consta que a muchas personas les puede parecer divertido, pero considero que no tiene nada de gracioso que desde un foro profesional y desde una jornada formativa promovida por una entidad pública se siga perpetuando un estereotipo semejante (“quitaniños”) sobre el Trabajo Social, por no añadir lo de que en donde estaban situadas las trabajadoras sociales presentes se notaba “oscuridad”. Sigue leyendo Las quitaniños en el lado oscuro. Reflexiones sobre estereotipos e identidad profesional del Trabajo Social
Fuera de control
Hasta marzo de 2020 teníamos una falsa sensación de seguridad, de tener bajo relativo control todo lo que sucedía en nuestras vidas (salvo accidentes o enfermedades sobrevenidas); a raíz de la pandemia por COVID-19, una sensación de incertidumbre y miedo se ha venido a instalar en nuestras cabecitas. Todas las profesionales de la psicología y psiquiatría que conozco coinciden en afirmar que desde el confinamiento los problemas de salud mental se han incrementado (pero ya estaban ahí); en el post anterior aludía a la sociedad del malestar en la que nos hallamos, en la que, paradójicamente, se nos insta a ser felices mientras que se sitúa la responsabilidad de esa felicidad en la persona individual, sin tener en cuenta el contexto opresor de desigualdad e injusticia social que nos rodea. Sigue leyendo Fuera de control
No somos histéricas, somos históricas
Esta frase ha sido un lema de los últimos 8 de marzo, lo he visto en varias pancartas y me encantó. Ahora ya no se utiliza tanto el término “histérica” en determinados contextos, pero se ha sustituido por otros similares que en el fondo vienen a decir lo mismo: cuestionar la capacidad de enfado, rabia y voz de las mujeres que se molestan ante decisiones o actuaciones machistas sin sentido. Este post ha sido inspirado por la intensidad de mi amiga Clara Bredy, a la que recomiendo seguir en su blog y a la que deseo siga viviendo la vida de esa manera intensa, y por este artículo (pincha aquí) también facilitado por ella y que recomiendo encarecidamente. Sigue leyendo No somos histéricas, somos históricas