Un aplauso que marca la diferencia

Hoy es un día feliz para la gente de izquierdas, para quienes confiamos en la esperanza de un cambio progresista que estabilice este país y le haga avanzar en derechos humanos, igualdad y justicia social. Y hoy es un día simbólico, porque hoy en el Congreso ha ocurrido algo más que una investidura, hoy en el Congreso se han mostrado claramente los límites de la decencia y la ética frente a la mezquindad.  Sigue leyendo Un aplauso que marca la diferencia

Claves comunicativas para favorecer la ética de los cuidados

Con las redes sociales y la comunicación tecnológica hemos perdido la calidez de las miradas, el contacto físico, los abrazos,… ahora todo se resuelve a golpe de whatsapp, perdemos más tiempo escribiendo que haciendo una llamada (al menos la voz tiene otra cercanía, podemos escuchar la inflexión, el tono, los silencios,…), pero no, ahora los emoticonos lo resuelven todo y eso se convierte en algo peligroso porque sustituye momentos que no pueden ser sino presenciales. Whatsapp no cuida, cuidan las personas, para reflexionar sobre esto propongo un decálogo de la comunicación para construir una ética afectiva y bientratante:  Sigue leyendo Claves comunicativas para favorecer la ética de los cuidados

Fracasos…

Últimamente tengo la sensación de que hemos fracasado como especie, que vamos abocados a la autodestrucción y que las voces que pretenden frenarla se enfrentan a tal entramado de poder que resulta totalmente imposible vencerlo. A la ciudadanía solo nos dejan la calle, los gritos, los cánticos, la lucha pacífica y feminista,… pero frente a la corrupción, la psicopatía de nuestros gobernantes y la inacción y pasividad cómplice de burócratas sin alma, a nuestro mundo no le queda mucha esperanza… ni tiempo.  Sigue leyendo Fracasos…

Juego de patriotas made in Spain

El pasado puente del 1 de noviembre me escapé a un hotel de 4 estrellas en el norte de la isla de desconexión y relax. Una tarde, tumbada en una hamaca leyendo, aparecen dos treintañeros con sus respectivas novias / parejas o lo que fueran, y se aposentan en las escaleras de entrada a la piscina bloqueando el acceso, salvo que les pidieras permiso o saltaras por encima. No éramos más de 20 personas en esa zona, la mayoría “guiris”; no sé si los cuatro “jinetes del Apocalipsis” dieron por hecho que nadie entendía español, pero allá que empezaron a vociferar contando sus hazañas carcelarias, porque sí, uno de ellos había estado en prisión (un primo suyo seguía dentro por pertenencia a banda organizada y no sé cuántos delitos), contando cómo tenían un colega Guardia Civil que les informaba del estado de sus antecedentes penales, cómo el sistema era una mierda porque mira tú, para lo que habían hecho y les cae una condena así, cómo la ley de violencia de género era otra mierda porque una mujer (a la que hacían referencia) fingía sus crisis de ansiedad, y claro, los hombres siempre eran los culpables y menuda injusticia… Y así media tarde. Como mi objetivo era el relax, tuve que moverme al otro extremo de la piscina para evitar oírles, pero reflexionaba internamente cómo tenía que ser yo la que se alejara mientras ellos disfrutaban alegremente y a voz en grito de sus cuitas penales sin cortarse un pelo y sin aparentar estar avergonzados. Y ellas allí, muy sonrientes, escuchando a sus machis sin abrir la boca. Uno de ellos llevaba una pulsera de España en la muñeca… Estos son los patriotas, este es el perfil de una buena parte de votantes de la ultraderecha: maltratadores, delincuentes.  Sigue leyendo Juego de patriotas made in Spain

¿Cambios o revoluciones?

Vivimos tiempos convulsos… y no solo en Cataluña (véase Chile). Hay un descontento generalizado de la ciudadanía con sus gobernantes; mientras la corrupción campa a sus anchas, la brecha entre ricos y pobres se agranda cada vez más. Y no parece que ninguna opción política (con posibilidades reales de gobernar) tenga una solución eficaz para afrontar las desigualdades e injusticias; en cambio, son especialistas en enzarzarse en debates absurdos o en pillar sillones y privilegios.  Sigue leyendo ¿Cambios o revoluciones?

¿Septiembre de acuerdos?

Y tras uno de los veranos más feminicida que recuerdo, llega septiembre con la incertidumbre gubernamental. ¿Habrá o no habrá acuerdo para un gobierno progresista?  That is the question. Después de estos últimos meses y visto lo que ocurre en Reino Unido cada vez me asquean más los personajes políticos que nos gobiernan, el desencanto de la ciudadanía va en aumento y de esto se aprovechan los sociópatas y psicópatas para acceder al poder sin frenos de ningún tipo. El recurso que nos queda es salir a las calles pero ni un nuevo 15M parece posible teniendo en cuenta los resultados del pasado.  Sigue leyendo ¿Septiembre de acuerdos?

Negociación versus cesión o imposición

Clara Coria tiene un libro muy interesante llamado “Las negociaciones nuestras de cada día”, absolutamente recomendable para negociar en pareja. Ella, al igual que otras/os autoras/es, plantea que en las relaciones humanas, podemos optar por tres tipos básicos (hay más) de resolución de conflictos: imposición: yo gano – tú pierdes; cesión: yo pierdo – tú ganas o negociación: acercamos posturas e intereses y ganamos ambas partes. Para negociar hay que situarse en una posición de poder, de cierto poder. No se puede negociar si no se tiene el poder, al menos, de creernos capaces de negociar, y en las relaciones entre ambos sexos esos poderes están repartidos de forma desequilibrada. Sigue leyendo Negociación versus cesión o imposición

In&Out of Social Work

Ser trabajadora social no mola, no es fashion, no es cool… Quitar niños/as o arreglar paguitas… puagh, qué demodé! Porque como todo el mundo sabe las trabajadoras sociales somos esas pérfidas mujeres (y unos pocos hombres) que se encargan de juzgar, cuestionar y arrancar retoños de los brazos de amantísimas familias o, en el mejor de los casos, decirle a ancianitas/os si tienen o no derecho a las miserias que reparte el maravilloso estado de bienestar que tenemos. Nosotras estamos ahí para garantizarlo, para no cuestionar el orden establecido… Pero incluso eso es ya muy antiguo, del siglo pasado…

Mary Richmond y su Social Diagnosis, por favor, qué cansinas somos con tanta Richmond! Con lo que mola tener como referente espiritual a Paulo Coelho, dónde va a parar! Donde esté Coelho que se quite Freire, otro Paulo, pero con menos flowSigue leyendo In&Out of Social Work

Sobre demandas, necesidades y expectativas en Trabajo Social

Mi cambio de trabajo me inspira para reflexionar sobre mi profesión… Recientemente he atendido a los padres de un chico con una grave discapacidad. La valoración de anteriores trabajadoras sociales y profesionales del sistema educativo que conocían a la familia es que «no responde», que «se les explican las cosas y no las hacen» y así sucesivamente. Conmigo han respondido. ¿Y por qué? ¿Acaso tengo una varita mágica? ¿Soy la mejor trabajadora social del mundo mundial? (Soy buena, sí, modestia aparte porque no tengo abuela, jajaja, pero no, tampoco es cuestión de echarme flores). Han respondido sencillamente porque ahora pueden hacerlo, porque tienen tiempo, porque cuando otras personas valoraban que era una familia desastrosa, se mataban a trabajar de lunes a domingo, de la mañana a la noche, para sacar adelante a la familia. Tan irresponsables no pueden ser unos padres que han hecho llegar una hija a la universidad, digo yo…  Sigue leyendo Sobre demandas, necesidades y expectativas en Trabajo Social

Yo elijo, tú eliges, ellxs eligen,… Reflexiones preelectorales.

El 28 de abril elegimos. Y no son unas elecciones cualquiera. Nunca antes en la historia de la democracia en España la ultraderecha se había visto tan bien posicionada en unos comicios. Hasta la fecha eran grupos residuales, minoritarios, una panda de nostálgicos franquistas que se vinculaban a grupúsculos falangistas y similares. Ahora se está produciendo un cambio sustancial aunque nada novedoso respecto al resto de países de nuestro entorno; yo, ingenua de mí, creí que nuestro país se salvaría del auge fascista que recorre Europa, pero no, ha llegado. Si la llegada es para quedarse dependerá de nosotras/os.  Sigue leyendo Yo elijo, tú eliges, ellxs eligen,… Reflexiones preelectorales.