Camino, una obra maestra de nuestro cine

Si aún no la han visto les recomiendo que lo hagan. Hacía tiempo que no veía una película tan brillante como Camino. Dirigida por Javier Fesser, se inspira en la vida de Alexia González Barros, niña que se halla inmersa en un proceso de beatificación en la actualidad. El caso real de esta niña lleva a Fesser a construir una magnífica historia de ficción con una base absolutamente real: la dinámica interna del Opus Dei, uno de los grupos integristas católicos más peligrosos y reaccionarios.

La película refleja, con una impecable puesta en escena, una historia de amor y sufrimiento que realmente resulta conmovedora si no fuera por el trasfondo ultraconservador que rodea a la protagonista. Los mecanismos de control de la «Obra» quedan patentes a lo largo de la película, el sexismo que impregna su dinámica sectaria y las manipulaciones a las que someten a sus numerarios/as se muestra de una manera clara y rotunda. Los furibundos seguidores del Opus ya han reaccionado contra Fesser, acusándole de desvirtuar la historia real de Alexia (cuando Fesser siempre ha insistido en que su película es una obra de ficción «inspirada» en hechos reales, no sólo el caso de Alexia).

Evidentemente no es una película para seguidores del Opus, pero si quieren ver buen cine y conocer de manera bastante acertada algunos aspectos de la «Obra» no deberían dejar de verla.

Nerea Camacho, la niña que interpreta a Camino es prodigiosa y el resto del reparto realiza una interpretación magistral.

El 26 de septiembre de 2008, el propio periódico «ABC» (nada más lejos del progresismo) recoge una crítica que afirma:

«Camino es una obra tan brillante como excesiva, que te provoca atracción y rechazo, que retrata de un modo radiante, cromático y gustoso algunos rincones oscuros de nuestro propio interior, al tiempo que describe (en realidad, se describen a sí mismos) ambientes oscuros, taimados y calculadores con la creencia de que están en el mismo foco de la luz del sol. «Camino» es polisemia pura, es pluralidad de significados y disparidad de sentimientos, supongo que es una película tan fácil de reprobar, de maljuzgar, como difícil de olvidar algunos de sus imborrables momentos. Todos sus actores están magníficos, Carmen Elías, Mariano Venancio, Manuela Vellés, pero la niña Nerea Camacho no está magnífica, está literalmente gloriosa, bienaventurada, completamente celestial.»

Para más información pueden visitar la web de la película:

http://www.caminolapelicula.com/

Y para añadir comentarios a la misma, leer a Elvira Lindo en El País del domingo 26 de octubre.

7 comentarios sobre “Camino, una obra maestra de nuestro cine”

  1. Ya se ve que, después del fracaso en taquilla (la 7ª película de la semana pasada, y eso que no había muchas más), a Fesser le interesa crear polémica antes del fin de semana.

    Cometí el error de ir a ver Camino, lo cual sólo me hizo pasar un mal rato con una película larga, lenta y sangrienta. Estoy de acuerdo con los críticos: el tema se aborda lentamente y la película resulta como una patada en el estómago. Tuve que irme al cabo de dos horas de película… y todavía le quedaba lo peor, según me han contado.

    La película ya está en la red para descargar. Os recomiendo que os la bajéis y gastéis ese dinero en unas buenas copas, en lugar de pasar un mal rato en el cine.

  2. Lamento que no compartas mis gustos. A mí me sigue pareciendo brillante, como a muchísima gente. Yo no recomendaría gastar el dinero en copas sino en buen cine. Pero está claro que cada persona tiene gustos diferentes. Gracias por tu comentario de todas formas.

  3. María: no estoy de acuerdo con partes de tu crítica -con otras sí- porque pienso que te falta información.

    Como sabes, Fesser está haciendo una intensa campaña de promoción -cada semana difunde un comunicado o una carta abierta para que se siga hablando de la película- y eso lleva a muchas personas a hacer afirmaciones como la tuya.

    Aceptas acríticamente todo lo que dice y afirma Fesser. Cada una es libre de creer a quien quiera. Pero los hechos son los hechos.

    Por eso te animo a ler un perfil biográfico de alexia, para que descubras que, en contra de lo que afirma, sigue paso por paso, la historia de su vida: su misma familia, su mismo colegio, el mismo nombre de sus amigas, la misma enfermedad, los mismos hospitales y críticas, y las mismas conversaciones…;eso, sí, vueltas del revés.

    Eso son los hechos. Me parece que Fesser es libre de darle caña a todo lo quiera, en este caso a la fe, a la iglesia y al opus, pero no a manipular los hechos y no reconocerlo.

    Y eso no le permite tampoco maltratar a una familia porque sean creyentes y el no; y deformar la vida de una madre y de una hija, y tener el sarcasmo encima, de dedicarle la película, y de decir que lo hace «con mucho cariño».

    Imáginate que alguien hiciera eso con tus padres y tu hermana muerta.

    ¿Que quiéres qué te diga? Este tipo de procedimientos denigratorios, y denonizadores me recuerdan a… un Jimenez Losantos por ejemplo. Y ya somos mayorcitos, me parece a mí, para creernos estas historias de buenos buenísimos y malos malísimos, y para demonizar al que no piensa como nosotros.

    ¿Quien se cree estas críticas en la que sólo falta ponerles cuernos al «enemigo»? Los que están algo fanatizados, solamente.

    He leido una crítica en un blog, que no está escrita por uno del opus precisamente, sino por una persona independiente, y me ha gustado, bastante:

    » Uno descubre que al final «Camino» se trata de una denuncia más que de la historia de la niña. Pero si se trata de una denuncia entonces habría que hacerle ver a Javier Fesser que si la religión es una píldora edulcorante, Disney y La Cenicienta también lo es. Es decir, ha sustituido una píldora edulcorante por otra, un tipo de manipulación por otro. ¿Cuál es su mensaje entonces? Trata de eliminar un comecocos y lo sustituye por otro comecocos».

    Bueno, y nada más. Perdona por la extensión, pero es que estoy harta de los comecocos, vengan de donde vengan. No sé tú.

  4. Hola Silvia, la verdad es que no he seguido mucho la campaña de Fesser. No acepto acríticamente lo que dice él porque la verdad es que no sé muy bien qué es lo que dice. Escribí mi comentario porque vi la película el viernes y me fascinó, independientemente de la polémica. Como obra cinematográfica me parece interesante, el argumento es bueno y la escenografía mejor. No soy crítica de cine, sino simplemente espectadora, pero sí conozco los riesgos de los fanatismos religiosos y la violencia y la manipulación que hacen determinados grupos de carácter sectario (especialmente sobre las mujeres), y eso me parece que la película lo transmite acertadamente. Que le duela al Opus… es su problema (supongo que ese viejo refrán de «quien se pica es que ajos come» viene al pelo en esta ocasión).
    Si Fesser ha incorporado demasiados hechos reales a la historia lo siento por lo duro que puede ser para la familia de Alexia (quienes me merecen todo el respeto) pero Camino no deja de ser una película «inspirada en hechos reales», no una historia real. Y sí, aunque no he seguido las declaraciones de Fesser sí me he interesado por conocer algo más sobre la vida de Alexia; algo positivo tiene la película, para quienes sean creyentes les habrá acercado a la vida de una niña que puede ser santa, para quienes no lo somos nos ha permitido conocer una historia de un alto interés humano.
    No he pretendido abrir una polémica en este blog sobre el tema, creo que hay otros foros más adecuados para ello pero agradezco los comentarios.
    Saludos cordiales

  5. » Camino» es realmente una obra maestra. Película muy inteligentemente hecha a pesar del mundo oscurantista en que se mueve.
    Hay dos tramas totalmente opuestas en la película que el director ha sabido ensamblar a la perfección.
    La inocencia, la ternura, la alegría, la sensibilidad, el amor, la ilusión y las ganas de vivir, frente al miedo, la rigidez, la cobardía y las distorsiones mentales de personajes que sólo encuentran la razón de vivir a través de unos esquemas morales impuestos que anulan su libertad y que pretenden al tiempo manipular la de aquellos que les rodean en nombre de Dios.

    Enhorabuena J. Fesser.

  6. Gracias por tu comentario Emilia que comparto totalmente. Y como hemos visto no debía ir muy desencaminada en mi valoración teniendo en cuenta el resultado de la gala de los Goya. De todas formas, yo seguiría pensando que la película es brillante aunque no se hubiera llevado ningún premio.

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